Empezó el colegio y las mañanas se volvieron caóticas en la mayoría de los hogares: Sacar a los chicos de la cama, hacer que se aseen, vistan y les entre algo de desayuno, antes de correr para no llegar tarde a clases.
Sin dudas, las mañanas son el momento más difícil para padres e hijos, pero tanta tensión y apuro pueden prevenirse siguiendo unos simples consejos.
La noche anterior
- Cuando los niños lleguen de la escuela, revisa sus mochilas por si hay algo que leer o firmar. Pregunta que necesitan llevar al día siguiente y dejen la mochila lista, cosa de no andar corriendo en la mañana.
- Las mochilas, ya listas, deben dejarse en una zona especial cerca de la puerta, cosa que sólo baste tomarla y salir.
- Si los niños llevan almuerzo al colegio, también debería quedar listo la noche anterior, guardado en el refrigerador. Si no es posible, déjalo lo más preparado posible. Para que se no se te olvide sacarlo, coloca la lonchera en la cocina, cerca de la zona de desayuno, eso te ayudará a recordarlo.
- Prepara la ropa: En vez de desordenar el armario completo en busca de ropa que combine y calcetines iguales, deja al lado de la cama el atuendo completo y listo para usar.
- Ir a la cama a una hora fija: Si quieres que tus hijos se levanten bien, necesitan estar descansados y por ello es necesario que siempre se vayan a dormir a una hora fija asegurando que duerman lo suficiente.
Por la mañana
- Antes de alistar a los chicos, prepárate tu. Levántate unos 20 minutos antes, alístate y te sentirás mucho mejor para comenzar la difícil labor de preparar al resto.
- Asigna horarios: Los niños pequeños pueden bañarse en la noche y solo darse una pequeña lavada en la mañana, mientras que los adolescentes requerirán una ducha. Trata que nadie choque con los horarios para el baño. Puedes despertarles de forma diferida. Mientras vistes a los más chicos, ya limpios, los mayores se bañan.
- Prepara un desayuno simple pero nutritivo: En vez de gastar mucho tiempo con un desayuno elaborado, prepara algo simple y nutritivo. Puedes dejar los ingredientes listos la noche anterior y armarlo por la mañana.
- Tostadas, frutas, huevos, leche y cereales: Siéntense a comer con calma y ojalá juntos, como forma de despertarse mejor y empezar el día con las mejores ganas.
- Revisa que cada chico tenga su mochila, lonchera, abrigo y lo que requiera para ese día.
- Si es que tu los llevas, revisa que todo esté en el coche y, si se van en bus, que lo esperen con tiempo, llevándose consigo sus cosas.
Lo ideal, es diseñar todo para estar listos 10 minutos antes de la hora de salida, así tienes algo de tiempo para aquellos imprevistos que siempre ocurren.
La mañana, si es ordenada y planificamos desde el día anterior, puede ser un momento tranquilo para prepararse para un día lleno de aprendizaje y juegos.
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