Los padres quisiéramos construir un escudo gigante que proteja y separe a nuestros hijos de toda la maldad del mundo, pero tarde o temprano se van a ver expuestos a hechos terribles que ocurren.
Al ver el noticiero, seguramente te enteres siempre de una o dos cosas que pasaron y que te hacen poner los pelos de punta, especialmente si están relacionados con violencia. Si te a ti te cuesta digerirlos, imagina a los chicos.
Cuando mi hermano era pequeño, llegó llorando donde mi madre luego de leer en el diario que una mujer asesinó a sus hijos (el leía a los 4). Mi madre le explicó que esa señora estaba loca, pero él siguió llorando al recordarle que ella siempre decía que a veces nosotros la teníamos loca.
Los niños entienden todo de forma literal y tratan de buscar explicación en lo que conocen. Por eso, está en nosotros hablar con ellos de violencia y lo que ocurre en el mundo, para ayudarles a comprenderlo y, de alguna forma, hacerles sentir mejor.
Violencia y niños
Los chicos, suelen alterarse mucho cuando se enteran de algún hecho que afectó a niños. Para ellos, el mundo de los adultos les resulta lejano, pero cuando algo malo le ocurre a una persona pequeña llegan los miedos, ya que se sienten identificados.
En diciembre pasado, todo el mundo vio con horror las noticias de un tiroteo que terminó con la vida de 20 niños en una escuela de Estados Unidos. Por mas que no vivamos en ese país, el hecho nos alteró y, por supuesto que si los chicos se enteraron, quedaron muy asustados.
En vez de esconderles lo que ocurre en el mundo, tarde o temprano lo van a escuchar en la calle o la escuela, lo mejor es hablar de lo que ocurrió con ellos, entender sus temores y reafirmar su seguridad.
No hay que mentir, pero si dosificar la información de acuerdo a su edad. Lo mejor es darles un panorama general, pero sin ir a detalles. Debemos decirles que ocurrió algo malo y que afectó a otros niños, pero que nosotros estamos allí para protegerles y que están seguros.
Un niño más grande o pre-adolecente, es capaz de entender la causa de los hechos violentos. Siéntate a hablar con ellos y pregúntales cuál creen ellos que fue la causa y pídeles que propongan soluciones.
De esa forma, los chicos van a reflexionar sobre el tema y nosotros vamos a saber cómo lo están tomando y qué herramientas tienen para enfrentar cosas dolorosas o impactantes en su vida.
Hablar de este tipo de temas en familia, ayuda a que todos se sientan más unidos y protegidos, reafirmándoles que, si bien existen peligros en el mundo, ellos que cuentan con nuestra protección y que siempre estaremos cerca, ya sea contenerles o ayudarles a entender el mundo.