El embarazo es un periodo en que nuestro cuerpo cambia y, esos cambios pueden venir con dolores o, simplemente se sufre de dolores cabeza o cuerpo normales, para los que solemos tomar algún medicamento.
Los analgésicos comunes, pueden no ser adecuados para consumir durante el embarazo, sólo hay uno que ha probado ser seguro:
Acetaminofén o Paracetamol: Uno de los fármacos para el dolor más utilizados, es seguro para mujeres embarazadas. Es el único analgésico permitido.
Durante el embarazo debes abstenerte de consumir ibuprofeno, naproxenoo aspirina. Puede ser que, en caso de necesidad, el médico te los recete. Sigue sus indicaciones y nunca te automediques ni te pases de la cantidad indicada.
Si estás resfriada o con gripe, el paracetamol vuelve a ser tu mejor opción, aunque evita aquellos combinados con otros fármacos como la pseudoefedrina y cafeína, entre otros.
Otras formas de controlar el dolor en el embarazo
Si quieres evitar los fármacos, existen otras opciones para el control del dolor.
- Masajes: Un masaje en el cuello o la espalda ayuda a controlar o eliminar dolores. Asiste a un masajista profesional con frecuencia y te sentirás mejor.
- Quiropráctico: El bebé nos mueve el cuerpo por dentro y, eso hace que vértebras se desplacen. El quiropráctico sabrá ajustarte y, si bien puede doler en el momento, es excelente a largo plazo.
- Aromaterapia: Consulta a tu médico acerca de cómo la aromaterapia puede ayudarte. El te recomendará el mejor aceite para tu caso y cuáles no deberías usar.
- Compresas calientes: Si te duele la cabeza, espalda o piernas, una compresa caliente puede ayudar bastante. Eso si, evita el usarlas sobre tu vientre.
- Compresas frías: Ideales para los dolores por inflamación en el embarazo, los que son bastante comunes. Las compresas frías ofrecen una buena solución con resultados rápidos.
- Yoga Prenatal: Más que aliviar, el Yoga Prenatal es una forma de prevenir los dolores en el embarazo, además de ayudarte a preparar tu cuerpo para el parto.
- Acupuntura: La acupuntura es un método seguro para el control del dolor en el embarazo, siempre y cuando acudas a un profesional entrenado. Puedes pedir una referencia a tu obstetra o matrona.
Lo mejor es siempre consultar al médico y seguir sus instrucciones. Quizá un cambio de posición al dormir pueda ayudarte (existen cojines especiales para ello), mantener los pies elevados o realizar ciertos ejercicios para fortalecer la musculatura en áreas especificas.