Los niños son especialistas en accidentarse, ya que sin miedo al peligro realizan acciones dignas de película de acción, sin saber que sus cuerpos tienen limitaciones. Difícilmente vas a encontrar a un pequeño libre de un par de lastimaduras.

Hay heridas que sanan con un poco desinfectante y una curita, pero los golpes en la cabeza son otra cosa y, cuando nuestro pequeño sufre uno, no sabemos bien cómo actuar más allá de ponerles una compresa fría en la zona.

¿Debo llevarlo a emergencias o esperar a ver qué pasa? Hoy, vamos a contarles cuáles son las señales que indican que el niño necesita atención profesional y, aquellas que ameritan observación cercana o sólo un abrazo de mamá para pasar el susto.
Cuándo llevar a los niños a emergencias por un golpe en la cabeza

Tu hijo no vio el peligro de saltar en la cama y, en medio de una pirueta, aterrizó de cabeza golpeándose en una mesa. Antes de decirles que eso les pasa por hacernos caso, entramos en pánico.

Hay señales que indican que es hora de llevar al chico a urgencias, las más comunes son:

• Perdida de conocimiento
• El niño no recuerda qué pasó o cosas que ocurrieron antes del accidente
• Dolor no solo en la zona afectada, sino que también en otras partes de la cabeza o cuerpo
• Hinchazón rápida en la zona afectada, especialmente en las zonas laterales y traseras de la cabeza
• El niño sólo quiere dormir y llora sin razón aparente
• Vomito
• Salida de líquido por nariz y/u oídos
• Dificultades con el equilibrio, tanto al caminar como al tomar objetos con sus manos
• Problemas para ver
• Una caída desde gran altura o golpe muy fuerte, no importa si el pequeño se ve bien
• Si se trata de un bebé pequeño

En estos casos, hay que acudir a la sala de emergencias para que el niño sea evaluado y ver si existe daño interno. Si el accidente es grande, es mejor llamar una ambulancia, ya que al moverlo podemos lesionarlo más.

Cómo tratar un golpe en la cabeza en casa

Después del susto y dolor momentáneo, nuestro niño no presenta síntomas preocupantes, pero igual es necesario tratarlo y observarle en casa.

• Utiliza una compresa fría en la zona de golpe. No hagas presión, es normal que se inflame
• Si se produjo un corte, monitorea el sangramiento. Una herida en la cabeza tiende a sangrar mucho más que una en otra parte del cuerpo, si no comienza a cicatrizar sola, puede ser que se requiera una sutura
• Vigila al niño, si se nota demasiado somnoliento o tiene un cambio en su forma de ser. En caso de dormirse, despiértale con frecuencia y analiza su nivel de conciencia con preguntas simples de responder

Mantén la guardia por al menos 48 horas y, si tienes dudas, contacta por teléfono al médico o centro de información de salud. Si tu intuición te lo dice, llévale a urgencias.

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