Los padres queremos que nuestros niños se alimenten lo mejor posible y, para ello tendemos a elegir las alternativas más sanas cuando vamos al supermercado. En el caso de las bebidas, optamos por lo jugos de fruta.
¿Sabías que casi el 100% los juegos envasados están llenos de azúcar, preservante y son altos en sodio? Darle a un niño jugos en vez de agua no les da nutrientes, sino que equivale a casi un caramelo.
Eso no significa que debas prohibirlos, pero mejor dejarlos para ocasiones especiales, lo mismo para las bebidas gaseosas. Si puedes, sustitúyelos con opciones caseras.
Jugo hecho en casa
Si decidiste hacer jugo en casa, escoge fruta de la estación y, en vez de hacer el jugo de inmediato, crea una especie de puré que puedas congelar. Así tendrás listo los ingredientes para preparar jugo rápidamente y en todo momento del año.
Lo ideal es que el jugo sea lo menos concentrado posible, utiliza bastante agua y no añadas azúcar. Los chicos se acostumbran al azúcar extra de las bebidas envasadas, cuando el que trae la fruta es suficiente.
Beber agua
Si bien podemos crear jugos sanos, estos son parte de lo que beberá tu hijo, no lo principal. Desde temprana edad, hay que acostumbrarles a tomar agua. Dependiendo de donde vivas, el agua de la llave puede tener un mejor o peor sabor. Si es posible, compra agua purificada, si lo haces por galones no es tan caro, aprovecha ofertas ya que dura bastante.
En mi caso, cuando hay una comida especial y los chicos esperan algo diferente, utilizo agua gasificada y añado unas gotitas de jugo de naranja, lo que le da un sabor y apariencia diferente.
A la hora de ir a la escuela, compra una buena botella de agua no desechable y siempre llénala y ponla en su mochila. Así tendrá siempre algo sano que beber. A la hora del almuerzo, puedes incluirles una cajita de leche, ojalá pura, desnatada o semi desnatada.
No soy muy fanática de los alimentos enriquecidos o fortificados, ya que si bien puede decirlo en la tapa, el contenido es muy bajo y estás gastando dinero en una mera propaganda. Pregunta al pediatra si es necesario o cómo puedes suplementar sus alimentos con los requerimientos de la edad.
Merienda saludable
Otra forma de hacer una bebida rica y especial, es a través de los llamados Smoothies, que se hacen con yoghurt natural, frutas e incluso vegetales. Por sus consistencia cremosa a los niños les encanta.
Los smoothies son ideales para la merienda, ya que en una sola comida tienes todos los nutrientes necesarios, además de ser bastante llenadores.
¿Qué beben tus hijos durante el día?